Se puede definir el concepto BTL como una cadena de métodos y prácticas publicitarias que pretenden establecer nuevos canales de comunicación entre la marca y el consumidor. Las siglas BTL (Below the Line – debajo de la línea) hacen reseña a las prácticas no masivas de comunicación administradas a fragmentos específicos del mercado. Para esto se pretende manejar formas impresionantes, creativas y sorprendentes que instauren formas novedosas de contacto para propagar un mensaje publicitario.
Asimismo, está comprendido que el BTL utiliza en su estrategia medios tales como el merchandising, eventos, actividades gremiales, patrocinios, sponsors, promociones, medios de difusión no convencionales y marketing directo, entre otros muchos. En ocasiones puede ser usado como complemento de campañas tradicionales, del tipo ATL. Es por esa misma razón que el BTL se conoce en su traducción al español como “debajo de la línea”, para representar su carácter no convencional de instituir canales de comunicación publicitarios.
En los últimos tiempos se ha visto un aumento en la presencia del concepto de BTL en agencias, medios y aunque el concepto no es nuevo, si se puede ver una extensión en la tendencia en el manejo de este tipo de estrategias. Esto es así porque a diferencia de las técnicas publicitarias tradicionales, el BTL crea un canal de comunicación más directo entre un posible cliente y la marca, así como una respuesta por parte del usuario más inmediata.
En efecto, se cree que otra ventaja del BTL es la posibilidad de establecer formas más creativas y menos costosas de relación de una marca con el comprador, así como la posibilidad de utilizar medios novedosos como parte de la táctica. Todo esto es posible si se usa un manejo apropiado de los conceptos y se tiene claramente identificado el fragmento determinado del mercado hacia el que va encaminado el mensaje.
Es en este caso donde es importante precisar cuándo es útil manejar una u otra técnica y cuándo es posible perfeccionarlas haciendo que el mensaje pueda ser lo suficientemente contundente y que genere los resultados esperados.
Sintetizando, el BTL, como la publicidad de guerrilla, vendría a ser el pasar por alto las ordenanzas fundadas respecto a lo que se debe hacer, en marketing, otorgar al trabajo elaborado de altas dosis de creatividad e ingenio y adoptar el riesgo que esto conlleva como algo positivo. Y que esto sirva para vender el producto, ganar más clientes, ofrecer más servicios como por ejemplo en un spa o un car wash. Si hay un tipo de estrategia de publicidad que a todo el mundo le acaba gustando, ese es el BTL, por lo que son labores que buscan realmente llamar la atención de las personas.
Según las consideraciones ya realizadas, es necesario enfatizar que las campañas BTL no manejan grandes medios o llegan a una gran cantidad, aunque depende el BTL, muchas veces está “contra” se ve apagada, dado que crean viralidad y llaman eficazmente la atención de las personas. Solo para que observen que tan efectivas pueden ser las campañas BTL, se seleccionaron 4 ejemplos tan atrayentes, que ni hace falta explicarlos y que sin haberlos visto en vivo y en directo, muchos terminarán conociendo a esa marca o inclusive hablando sobre la misma.
Es muy notorio como cada una de las publicidades tienen un gran nivel de creatividad, es por ello que fácilmente pueden atraer la atención de los usuarios. Sin duda alguna, la técnica BTL puede ser muy lucrativa en el ámbito de la publicidad.