Se define como contrarreforma pues fue la manera en que protestó la iglesia católica ante el progreso de la Reforma Protestante que Martín Lutero había comenzado en transcurso del siglo XV, desarrollándose la quiebra entre el religioso alemán y el cristianismo en el año 1517, cuando Lutero preciso un conjunto de confidencias contra los integrantes de la iglesia como la comercialización de comprensiones como exigencia para conseguir la clemencia de los pecados, se enfrentó a un gran fragmento de los sacramentos.
La Contrarreforma pretendió asignar la fe católica, juntando distintamente el cristianismo, clasificándose en católicos y protestantes, tras haber afirmado sus creencias, que Lutero había reprochado, en el Concilio de Trento que tuvo espacio entre los años 1545 al 1563. Se ratificó el rango eclesiástico y la jurisdicción mayor del Papa, se modernizaron las disposiciones religiosas asignando reglas rigurosas, se fundaron establecimientos de educación religiosa y recientes disposiciones, entre las que se recalcó la Compañía de Jesús.
Para combatir contra los que nombrados sacrílegos e infieles se reintegró el Tribunal de la Inquisición y se elaboró una enumeración con libros no afirmados por la iglesia nombrados como “Índice de Libros Prohibidos”.
La contrarreforma política es una transformación de la condición de una ley, sistema y propósito sin afligir a características importantes que logran ser convertidos en otros diferentes. Dentro de una relación determinada se utiliza para dar un concepto de renovación, enmienda, reparación, puesta en disposición, novedad y optimización de algún caso.
En toda circunstancia, es una variación que no interrumpa o suplanta la resolución social y político determinado, posee por tanto, predisposición a reprender condiciones arbitrarias incompletas. El vocablo de contrarreforma proviene de siglos atrás, ya nombrado anteriormente.
Se cual fuera la afirmación autónoma, emplea la contrarreforma en esta orientación de transformación no fundamental, alcanzable de un mecanismo social dado y con los recursos que la ley institucional determinado posee para conseguir las variaciones sociales, económicos o políticos y de ahí con continuidad en las composiciones presentes consignados a las contrarreformas mismas, aunque sus transformaciones en realidad auténtica suelen desarrollarse por recursos y técnicas revolucionarios.
Entre revolución y contrarreforma suele existir una circunstancia de nivel. Quizás sea mejor asegurar que se trate de dos sucesos diferentes, aunque casi siempre relacionados, puesto que en muchos casos la necesidad de aquellos elásticos renovadores logra desarrollar genuinas revoluciones.
Contrarreforma en la política es una serie de órdenes establecidas a cambiar a fondo una fundación acatando sus trazos primordiales y sin que se origine una quiebra de secuencia. El logro de los cambios solicitados por la contrarreforma puede ser muy diverso, pero en toda circunstancia envuelve una innovación a fondo de la fundación. Con lo que se diferencia del progreso normal que envuelve un cambio continuo pero sin una mediación a fondo que selle una modulación en la línea progresiva.
Las agrupaciones que muestran el poder frecuentan admitir una contrarreforma política para impedir que la coerción social resulte en una revolución o en un disturbio violento que les haga desaprovechar su posición de inmunidad.
En otros conceptos, hay áreas que distinguen admitir o promover una contrarreforma política y conceder algo de régimen que amparar su posición y exponerse a desaprovechar todo por una causa violento e impredecible. Al momento de lograr llevar a cabo una contrarreforma política, cada nación determina un conjunto de prototipos y fundamentos en cuanto a efectuar la misma.