En el ámbito de la medicina, el suero es una solución constituida por diferentes compuestos del organismo, es decir, suero fisiológico. El cual lo forma el cloruro de sodio al 0.9%, pH, osmoticidad y fuerza iónica, además, está compuesto de agua, electrolitos y en ocasiones por diversas sustancias, por ejemplo, la glucosa, energía y fuente de carbono para el organismo y de ciertos polisacáridos.
Los médicos solicitan al suero fisiológico para inyectar algunas sustancias al organismo o para contribuir elementos necesarios cuando se genera una disminución en el volumen de sangre. El suero fisiológico, por otro lado, permite la irrigación de tejidos y cavidades. Este tipo de suero también es indicado para curar cortaduras en la piel, en obstrucciones nasales y en vómitos continuos (vía oral).
La formulación artificial del suero fisiológico es importante para la fecundación in vitro, así como también para el crecimiento de embriones in vitro sumergidos en el mismo
También, existe el suero sanguíneo, el cual se refiere a la parte de la linfa o de la sangre que conserva el estado líquido después de un proceso de coagulación. En decir, en el momento que la sangre se coagule, la parte de ella que sigue estando líquida y no cambia su etapa es el suero. Asimismo, se conoce como suero inmunológico al suero sanguíneo que contiene anticuerpos de tipo policlonal. Este suero se utiliza por medio de transfusiones, para el tratamiento de diversas infecciones.
Además, cuando se coagula la leche, también existe un componente que se mantiene líquido, esta sustancia se le llama suero de la leche. Este se obtiene a través de la elaboración del queso, separándolo de la cuajada. El suero lácteo es un líquido turbio y de color entre amarillo y verde. De acuerdo a la manera de coagulación puede ser dulce, ácido o amargo. Pero en todos los casos contiene fósforo, calcio, proteínas, grasa y lactosa.
Este tipo de suero, es considerado por mucho tiempo como un desecho difícil de manejar y eliminar dado a las numerosas cantidades producidas en la industria del queso, la cual es actualmente una de las materias primas más empleadas en el ámbito alimenticio.
Por otra parte, existe el denominado suero de la verdad, conocido como un fármaco psicoactivo que se utiliza para obtener la confesión forzosa por parte de una persona que se niega a colaborar con algunos datos. De acuerdo al Derecho internacional, usar este suero es una de las maneras de tortura conocidas oficialmente, aunque este no evita que en el área de la psiquiatría se emplee a pacientes psicóticos para evaluarlos y tratarlos.
Asimismo, entre las sustancias químicas que constituyen el suero de la verdad están la escopolamina, el temazepam y el etanol, entre otros hipnóticos y calmantes aptos para afectar las funciones cognitivas de alto nivel, como ser la capacidad de resolver problemas, la planificación, entre otros.
Por último, el suero puede ser también algo formado artificialmente. Tal es el caso del suero como solución salina que se emplea en el ámbito de la medicina como en la veterinaria. Este suero es un líquido salino que está constituido mayormente por agua y que incluye diferentes tipos de nutrientes empleados al agua en una dosis útil para las personas o animales convalecientes. El propósito principal de este tipo de suero es permitir que el sujeto o animal reciba los nutrientes y minerales principales aun cuando su estado no le permita sustentarse por sus propios medios.