Triunfo del Keynesianismo



El triunfo del Keynesianismo o del paradigma keynesiano, impulsado por John Maynard Keynes, ha logrado predominar notablemente dentro de la economía moderna y con gran certeza mantendrá su prevalencia; esta modalidad estudia las irregularidades asociadas a la economía, como: los consumos excesivos, salarios, empleo, desempleo, financiación e inversión, ahorro y el rendimiento productivo. De esta forma, las deficiencias del mercado tan significantes en una economía, se pueden reparar si el gobierno aplica una política fiscal efectiva. Uno de los efectos de una demanda baja es la desocupación, de no utilizarse razonadamente los recursos industriales.

Triunfo del Keynesianismo
Keynes, en su momento demostró que sus colegas economistas, motivado a su aprobación insensata del Fundamento o ley de Say, prácticamente afirmaron la inviabilidad del cataclismo económico por el que a nivel mundial se estaba sin vacilación, atravesando en su época. Basándose en ello, presentó un estudio profundo sobre economía capitalista que evidencia que la postración o el paro, son los patrones a los que suele inclinarse la economía. La magnitud del triunfo de Keynes, proviene de la ocasión en que accionó una arremetida vencedora contra el tradicional organismo doctrinal y la idea igualmente respetable de la política económica de su tiempo.

Las explicaciones de Keynes se pueden resumir de esta forma: al crecer la inversión, progresa la situación económica general de la nación y los obreros porque sí, perciben sueldos más elevados lo cual les permite utilizar una mayor parte de éstos para el ahorro. Pero si los bancos matrices no reducen sus tasas de interés, no existirá motivo alguno que estimule la inversión, pues se vuelve demasiado onerosa y cuando esta se paraliza, el capital que se atesora no es movilizado; es decir, no circula y se mantiene guardado en los bancos. Así, las personas consumen menos y las empresas no logran despachar sus productos totalmente, lo cual obviamente les ocasiona pérdidas y ante dicha situación, la primera acción que aplican los dueños de las mismas, es la cesantía masiva de empleados, con el objeto de acortar su personal para poder mantener al obrero que es necesario.

Por otra parte, Keynes concede al Estado en su propuesta económica, una función dinámica de gran relevancia, proveniente del incremento de los gastos fiscalesTeoría general de la ocupación, el interés y el dineromacroeconomía. Keynes enfatizaba mucho en la terminología “general”, para dar a entender que los juicios tradicionales solamente se ajustaban a un caso específico, dejando relegado varios hechos que exigían una explicación y/o solución.

Para la consideración keynesiana, las ocupaciones están sujetas a la demanda efectiva y el desempleo, deriva de la carencia absoluta de aquella. La solicitud de bienes se refleja en el desembolso de los fondos, si se elevan los ingresos de una colectividad, igualmente se intensificará su consumo, pero éste último en menor escala. Por tal motivo, para que se produzca la necesaria demanda de artículos se debe conservar un nivel equilibrado de empleo y además, son imperativas las inversiones que corresponden a la diferencia que se obtiene, de la renta y los gastos.

Los análisis de Keynes revelaron, que la inadaptabilidad de los salarios no es el único elemento que genera la desocupación y aunque se de una competencia excelente en todas las plazas y los precios sean ajustados inmediatamente, las iniciativas de los inversionistas, también inciden en la demanda y en la cantidad de empleos. No solamente el paro, del mismo modo la inflación está vinculada con el nivel de demanda positiva; pero cuando la misma es baja, se origina la cesantía y al ser exagerada se suscita la inflación.


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