La zona pelúcida representa aquella capa externa que envuelve el ovocito de los mamíferos, separándolo del espacio perivitelino. Se encuentra formada por varias glicoproteínas, agrupadas en cuatro familias, ellas son: ZP1, ZP2, ZP3 y ZP4 según sus pertenencias inmunológicas y eficaces, posee un espesor total de 0.015-0.020 mm. Es importante mencionar que esta zona se encuentra desde la alineación del folículo primario, cuando las células epiteliales se tornan de planas a cúbicas.
La función principal que tiene la zona pelúcida radica en que se encarga del resguardo y alimentación prematura del ovocito y del pre-embrión durante sus primeros días de perfeccionamiento menstrual, combinándolo en un volumen pequeño. Según estudios que se han realizado mediante la microscopía, manifiestan que las glicoproteínas que la constituyen tienen recibidores y activadores para los espermatozoides, proporcionando la fecundación en el óvulo. También asumen un papel fundamental en la reacción acrosómica, provocando la misma. Por lo tanto, el endurecimiento trasero a la entrada del espermatozoide ocurre debido a una segunda des-polarización de la membrana (inducida por iones de calcio), es esencial para el bloqueo poliespermático (polispermia).
Las investigaciones en el área de la biología han indicado que las anomalías en la organización o función de las glicoproteínas de esta capa pueden formar fecundaciones anómalas, una deducción de la viabilidad embrionaria y menor capacidad en la implantación de embriones en tratamientos de fecundación in vitro. Por lo tanto, cuando se extiende la edad de la mujer, crecen las probabilidades de que se cause la fecundación de un ovocito por más de un espermatozoide debido, principalmente, a dichas variaciones en la zona pelúcida. En la mayoría de los casos, estas fecundaciones anómalas dan lugar a cigotos triploides que no implantan pero, en categóricos casos, pueden hacerlo proporcionando lugar a un conjunto de células que van progresando denominado “mola” que puede llegar a ser peligroso para la mujer.
Es importante mencionar que durante el quinto día del desarrollo del embrión, la zona pelúcida se irá degenerando a través de una sucesión de períodos de expansión y contracción, como también por el trabajo de enzimas, para dar paso a la implantación. Desde la formación del cigoto, éste puede tomar el nombre de embrión unicelular y posteriormente pasa a ser el embrión en etapa de blastocisto y al eclosionar de la zona pelúcida, se denominará embrión o blastocisto implantado.
La biología también señala que la zona pelúcida es una capa extracelular de respectiva dureza y refringente a la luz. Esta capa resguarda al embrión durante la segmentación y previene al embrión de fijarse al oviducto en su migración al útero. Por lo tanto, los mucopolisacáridos producidos por las células foliculares que envuelve al ovocito (cuando está en el folículo primario) se colocan alrededor del ovocito creando la zona pelúcida.